La historia de Beyhan Mutlu, un hombre turco de 50 años, es surrealista y da cuenta de que una borrachera puede provocar situaciones rocambolescas e innecesarias, como movilizar a un equipo de emergencias para nada.
Su historia ocurrió en el distrito turco de Inegöl el pasado 28 de septiembre, cuando se denunció su desaparición mientras se encontraba bebiendo en un bosque con sus amigos, un lugar habitual de reuniones de este grupo.
Según informa el diario turco 'Milliyet', el grupo de amigos se encontraba tomando copas en ese lugar cuando de pronto notaron la ausencia de Beyhan. En ese momento llamaron a su esposa para cercionarse de que había regresado a casa, pero ésta comunicó que no había llegado al domicilio.
Fue entonces cuando llamaron a las autoridades para informar de que podía estar perdido en el bosque. Los rescatistas se desplazaron hasta el lugar para tratar de localizarle.
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Lo surrealista de la historia es que Mutlu acabó uniéndose a los equipos de rescate. Nadie se dio cuenta de que la persona que buscaban era él hasta que un miembro del operativo gritó su nombre. "Estoy aquí", respondió él. Finalmente, y tras comprobar que se trataba de Mutlu, las autoridades le acompañaron a su casa.
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La información ha sido facilitada este martes por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), que previamente había informado de que los resultados de la autopsia del cadáver.