Un Boeing 777-300 de la compañía holandesa KLM inició su viaje con destino Perú. A los pocos minutos de despegar de Ámsterdam, un rayo impactó contra el avión, atravesándolo.

Entró por el morro y salió por el ala izquierda sin causar ningún daño gracias al efecto 'Jaula de Faraday'. Y es que las descargas eléctricas no suponen ningún peligro para los aviones y suele ser bastante frecuente que ocurra.