El inesperado giro de la investigación del kayakista desaparecido en agosto: fingió su muerte y huyó del país para cobrar un seguro de vida

La investigación que buscaba al kayakista Ryan Borgwardt, desaparecido el pasado mes de agosto en un lado de Wisconsin, ha dado un giro de 180 grados. Fue su familia quien denunció sus desaparición el pasado 12 de agosto. Él era padre de familia y había salido a navegar en kayak. Antes de regresar a su casa, envió un mensaje diciendo que volvía y que llegaba para comer, pero nunca apareció.

Se movilizaron buzos, drones y varios equipos de rescate. Todo ello destinado a encontrar al desaparecido. "Tenemos una buena zona perimetrada donde creemos que podría estar el individuo", decía en agosto Mark Podol, sheriff del condado de Green Lake, lago de Wisconsin en el que desapareció Borgwardt. Creían que se encontraba en la parte más profunda del lago.

Las autoridades creyeron que se había ahogado en el lago. Una teoría que reforzaban los hallazgos que se produjeron tras días de búsqueda. Y, es que, las autoridades encontraron su camioneta en un lugar cercano y luego su kayak volcado.

Sin embargo, 54 días después de la desaparición, el equipo de búsqueda ha dado un giro inesperado a la investigación: han descubierto que Borgwardt había contratado un seguro de vida con anterioridad, se había hecho un nuevo pasaporte y había estado hablando con una mujer en Uzbekistán.

A raíz de estos descubrimientos, la Policía dedujo que había fingido su muerte y huido a Europa.

Finalmente lo han encontrado en el viejo continente y, tras hablar con él, le han pedido una prueba de vida. Como puedes ver en este vídeo, el propio Ryan Borgwardt, habla a cámara y se presenta confirmando su identidad. "Buenas noches, soy Ryan Borgwardt. Estoy en mi apartamento salvo, seguro y sin problemas", ha manifestado confirmando que está vivo. Una historia que, sin duda, parece el guion de una película