Decenas de personas viven en las calles alrededor de la Sagrada Familia. Ahora, a 10 años para la finalización de las obras del templo, esos bloques deberían derrumbarse para dejar paso una amplia avenida y una escalinata de acceso diseñada en su momento por Gaudí.
"La voluntad de los vecinos es que la Sagrada Familia en su casa y nosotros en la nuestra", explica Salvador Barroso, presidente Asociación Afectados por la construcción de la Sagrada Familia, dejando clara la intención de los vecinos.
El Plan General Metropolitano de 1976 prevé una afectación en unas 1.000 viviendas, algunas construidas a principios de siglo XX. De hecho, una conocida constructora consiguió la licencia para levantar este bloque de pisos, ahora en lucha, justo delante de la fachada de la Gloria, todavía por terminar y que será la verdadera entrada a la basílica.
El problema lleva enquistado casi medio siglo. Con varias propuestas de los diferentes gobiernos municipales que contemplan más o menos expropiaciones y realojos que nunca se han llegado a materializar.
Ahora, tras la primera reunión de la administración Collboni con los vecinos, el Ayuntamiento quiere acabar con la provisionalidad de los afectados en esta legislatura. "Hemos pedido a la junta constructora una propuesta y trabajaremos por el consenso", explica Laia Bonet, primera teniente de la alcaldía de Barcelona.
"Va a haber afectados y lo que pedimos es que sean realojados en el mismo ámbito a coste cero, incluida la mudanza y que lo pague el templo", indica Gabriel Mercadal, tesorero de la Asociación de Vecinos de la Sagrada Familia.
Enfado de los afectados
Fango y hedor en las zonas asoladas por la DANA casi un mes después: "Estamos abandonados"
El contextoHa pasado casi un mes desde que la DANA arrasara numerosos pueblos de Valencia, pero el lodo sigue todavía presente en muchas casas y garajes. Tres de sus alcaldesas piden acelerar las actuaciones.