Las intensas lluvias en el norte peninsular han provocado una importante crecida de los ríos Arga y Ultzama, que han acabado desbordándose en diversos puntos de Navarra. Las consecuencias de las precipitaciones se han sentido, sobre todo, en Pamplona, Burlada y Villava.
De hecho, en la zona de Martiket, en Villava, una mujer ha tenido que ser evacuada de su domicilio por el Grupo de Rescate Acuático de los Bomberos. Y es que, el agua ha alcanzado el metro de altura en el interior de la vivienda.
Además, los bomberos también han tenido que rescatar a una persona que ha quedado atrapada en el interior de un vehículo en la travesía del Club de Natación hacia el Vergel, en Pamplona. Así lo ha confirmado la Policía Municipal de Udaltzaingoa en su cuenta de Twitter.
Por este canal también han pedido a la población que no utilice sus vehículos para desplazarse por la peligrosidad de las inundaciones y los cortes que se están produciendo en diversas carreteras.
Según el Observatorio de Doneztebe, en este municipio han caído 110 litros en las últimas 24 horas. Mientras, en Eltzaburu se han registrado 87 litros, en Bera, 70 y en Pamplona, 53.
Por su parte, las avenidas de los ríos han superado las previsiones iniciales, y en el caso del Arga, su caudal se ha acercado a los 500 metros cúbicos por segundo y se ha multiplicado por 10 en solo 24 horas lo que ha provocado la inundación de las orillas en la zona de Martiket y en el tramo de los Corralillos y terrenos de huerta en Pamplona.
En estos momentos, se encuentra cortada la PA-30 (Ronda de Pamplona) por inundación del paso subterráneo de acceso al polígono de Landaben, y también está cortada al tráfico por desbordamiento del río Arakil la carretera de La Barranca en el kilómetro 13,3.
La situación también es complicada en la zona cantábrica, con avisos por posibles desbordamientos. Tanto del río Bidasoa (que se encuentra en alerta roja en la estación de Endarlatsa) como del Urumea, y el Irati y el Ultzama también han registrado una notable crecida.