El acusado, con dos
hijos de una relación anterior, y la madre de la joven fueron pareja durante
ocho años, relación que duró hasta que ésta conoció los hechos denunciados por
su hija, quien, junto a su hermano menor de edad, fue adoptada por la mujer con
una pareja anterior al varón denunciado, según han indicado fuentes del caso.
La joven denunciante,
con 23 años actualmente, tiene diagnosticada una inteligencia límite, con
alteración de la conducta y trastorno adoptativo, una limitación de sus
capacidades intelectivas, que condicionan de manera importante sus capacidades
volitivas, "le hace fácilmente influenciable", según el auto por el
que el Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla acordaba el ingreso en
prisión de E.F.B. en junio de 2016, si bien, el noviembre del 2017 el encausado
logró quedo en libertad provisional tras el escrito presentado al juez
instructor por su abogado David Pareja.
En el citado auto de
2016, el juez instructor recoge que la joven vive con su madre, quien no
convivía con el acusado en los primeros años de relación con éste, que
pernoctaba en ocasiones en casa de su pareja por aquel entonces. A partir de
septiembre de 2014, sí vivían juntos en casa de la denunciante.
Durante su declaración,
el acusado, en libertad provisional con obligación de comparecer en la Oficina
de Presentaciones del Juzgado Decano y con prohibición de aproximarse a menos
de 300 metros o de comunicar con la joven, negó los hechos denunciados y
cualquier tipo de relación o contacto sexual con la hija de su expareja, aunque
sí que reconoció que recibió dos fotos desnudas de ella en el móvil, pero
"las borró".
Además, admitió que
"su fallo fue no contarle a su pareja" que su hija "siempre
andaba buscándole" y le "acosaba", quien incluso "le dio un
beso en los labios sorpresivamente delante de la madre".
De otro lado, obra en la
causa fotografías de un calendario incluido en una aplicación del móvil de la
joven para calcular sus periodos de fertilidad, ovulación y menstruación. En el
calendario, según explicó ella en su declaración judicial, iba haciendo
anotaciones a diario de las relaciones que mantenía con la pareja de su madre.
Estas anotaciones, a las que ha tenido acceso Europa Press, recogen de manera
muy explícita y detallada las relaciones.
Igualmente, obra en la
causa dictamen técnico facultativo de la Consejería para la Igualdad y
Bienestar Social sobre el grado de discapacidad, el atestado de la Unidad de
Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional realizado tras la denuncia
presentada por la madre y la joven por abusos sexuales con penetración, así
como el informe médico forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla sobre
la salud mental de la denunciante.
El citado informe concluye que la joven presenta una
inteligencia "límite o retraso mental ligero" en una personalidad
"inmadura"; "dificultad para la previsión y orientación de su
propia vida"; "fácilmente influenciable"; que "conoce lo
que es una relación sexual y las diferencias entre tocamientos, penetración,
felación,..."; y que "sus capacidades para conocer la ilicitud de los
hechos y la trascendencia de la judicialización del caso son suficientes".
A este respecto, el
informe, en sus consideraciones médico-legales, expone que la joven "tiene
capacidades intelectivas y volitivas suficientes para conocer las diferencias
entre el bien y el mal".
La causa, que en sigue
fase de instrucción, está a la espera de la práctica de nuevas diligencias.
Así, el abogado de la defensa, David Pareja, ha solicitado que vuelvan a
valorar los forenses el grado de discapacidad de la joven y que, entre otras
cuestiones, analicen si es compatible los comentarios recogidos con todo detalle
en su diario en el móvil con la actitud de una joven víctima de abusos
sexuales. Asimismo, valorar su capacidad de decisión para saber y tener
conocimiento de lo que hace, para comprobar que "no fue intimidada ni
coaccionada", como expone la denunciante. Además, ha solicitado para su
cliente la práctica, de nuevo, de una prueba de impotencia sexual, con la que
pudiera descartarse, como dice la joven, que la penetrara de forma anal.