Mia Smith, la novia de un joven británico que murió tras caerse por el balcón de su habitación en Magaluf, culpa a los hoteles del accidente por poner barandillas demasiado bajas que, asegura, parecen estar "esperando un accidente". La chica ha acudido a Twitter para denunciar lo que considera una irresponsabilidad por parte de los establecimientos, quienes "hacen dinero" a partir de "grupos animados con alcohol".
Según ha explicado la joven, su novio "salió al balcón después de una noche de fiesta y se cayó". La británica ha afirmado que las barandillas quedan "a la altura de la cadera", lo cual resulta muy peligroso. "Si es posible tropezar y caerse de un balcón es 100% una altura no segura", ha expresado en un tuit que ya es viral.
Mia Smith ha aprovechado para exponer "la falta de concienciación y de promoción de la seguridad" que hay por parte de los hoteles españoles, y ha asegurado que muchos de ellos "experimentan estos horribles accidentes y no hacen nada por cambiar las alturas de sus balcones".
Según ha manifestado, ella desconocía la cantidad de accidentes de este tipo que se producen en España debido a la falta de información sobre los mismos. También se ha dirigido a los hoteles declarando que ellos "saben que sus huéspedes van a emborracharse" y, por tanto, deberían "asegurarse de que hay precauciones extra para mantenerlos a salvo".l
laSexta ya informó de las declaraciones del cónsul de Reino Unido quien afirmaba, en relación al 'balconing', que "los británicos no están acostumbrados a vivir en pisos con balcón" y los incidentes este tipo son "caídas accidentales" motivadas por un exceso en la ingesta de alcohol. Varios medios de comunicación británicos han denunciado también la presencia de carteles que incitan a los turistas a practicar 'balconing'

Hallado muerto el 30 de octubre
Miguel, el hombre que murió dos veces: una de las víctimas de la DANA ya había sido dado por fallecido en 1994
Los detalles Miguel M.M. desapareció en 1994 y su familia, tras no saber nada de él durante 10 años, certificó su fallecimiento. No obstante, 30 años más tarde, su cuerpo fue encontrado en un campo de naranjos de Quart de Poblet tras el paso de la DANA.