La juez que instruye en
Pozoblanco (Córdoba) el caso de presuntos abusos sexuales a una joven por parte
de cuatro miembros de 'La Manada' ha decidido procesar a cuatro miembros de ‘La
Manada’ por presuntos delitos de abusos sexuales, contra la intimidad y,
únicamente al guardia civil, un delito de maltrato.
La misma juez ya dictó
una orden de alejamiento para proteger a la víctima que obligaba a los
investigados a no acercarse a menos de 500 metros del lugar donde resida la víctima
o de su puesto de trabajo.
Los presuntos abusos
sexuales que investiga la juez ocurrieron en mayo de 2016 sobre una joven de
Pozoblanco que entonces tenía 21 años, tras la feria de la localidad cordobesa
de Torrecampo.
El juzgado cordobés
asumió el caso en octubre de 2016, cuando el titular del Juzgado de Instrucción
número 4 de Pamplona le comunicó el hallazgo de un vídeo donde veía indicios de
abusos a una chica de esta localidad cordobesa.
La otra víctima de La Manada declaró de forma voluntaria ante el juez y contó que no fue consciente de que la estaban grabando y que jamás ninguno le pidió permiso para difundir esos vídeos.
Se grabaron dentro del coche mientras manoseaban a la joven inconsciente como muestran las imágenes extraídas de los vídeos que lo demostrarían. Ella fue localizada por la Policía y denunció.
Cuatro de los cinco condenados por abusos sexuales a una joven en San Fermín también están relacionados con otra denuncia de una chica en Pozoblanco. 'El Prenda' fue la persona que grabó todo, y mandó las imágenes en los chats de 'La Manada' y 'El Peligro'.