EL TIEMPO PROVOCÓ SU AVANCE
La agonía que vivieron los vecinos de Moguer cuando las llamas tocaron a su puerta: "Mi mujer estaba dormida"
Las fuertes rachas de viento junto a la sequía y las altas temperaturas ayudaron a la rápida propagación del incendio en Moguer. En una hora las llamas llegaron a las viviendas y miles de personas tuvieron que ser desalojadas.
Caía la noche y empezaba el infierno para los vecinos de Moguer. Sobre las 09:15 se desataba el incendio en una zona de pinar y rastrojos, las llamas avanzaban a casi 50 kilómetro por hora empujadas por un fuerte viento. En menos de una hora se declaró el nivel 1 de alerta y se ordenó desalojar hoteles, casas y campings de la zona.
"Empezó a pasar la Guardia Civil para salir de las casas. Mi mujer se había quedado dormida, yo venía de recoger a la niña" cuenta un vecino. Más de 2.000 personas huyeron con lo puesto y se llegaron a colapsar salidas y carreteras. Muchos no sabían ni siquiera qué ruta segura podían tomar.
Los vecinos se han alojado en casas de familiares o amigos. Otros, han podido pasar la noche en el polideportivo de Moguer, habilitado por los servicios de emergencias. Estaban a salvo, pero el susto y la incertidumbre hacían imposible pegar ojo.
Cerca de las tres de la mañana, con el incendio ya extendido al paraje Natural de Doñana, la Unidad Militar de Emergencias sumó efectivos a la lucha sobre el terreno. Para entonces el fuerte viento había llevado el fuego también hasta invernaderos y cultivos de la zona.