El aumento de las temperaturas en Australia derivado del cambio climático redujo en un 89 por ciento la recuperación de los corales de la Gran Barrera, en el noreste de país oceánico, publica hoy un estudio científico.
El mayor arrecife de coral del mundo, que se extiende a lo largo de unos 2.300 kilómetros y puede apreciarse desde el espacio, sufrió por dos años consecutivos, 2016 y 2017, devastadores efectos por el blanqueo coralino.
"El número de nuevos corales que se asentaron en la Gran Barrera disminuyó en un 89 por ciento tras la pérdida sin precedentes de corales adultos a consecuencia del aumento de temperaturas en 2016 y 2017", dijo Terry Hugues, autor principal del estudio publicado en la revista Nature.
"Los corales muertos no se reproducen", acotó Hugues, también director del Centro de Excelencia de Estudios de Arrecifes Coralinos de la Universidad James Cook (JCU, siglas en inglés), en un comunicado de su institución, en referencia a la Gran Barrera.
El experto indicó que se calcula que los corales se recuperen gradualmente en los próximos cinco a diez años "a medida que los que sobrevivan crezcan y la mayoría de ellos alcance su madurez sexual, asumiendo por supuesto que no se dé otro blanqueo masivo en la próxima década" en la Gran Barrera, que hasta la fecha ha sufrido cuatro eventos de este tipo en 1998, 2002, 2016 y 2017