Desde ahora, cualquier registro de uso del teléfono móvil será también una herramienta para investigar las causas de un accidente de tráfico

Bartolomé Vargas, Fiscal Jefe de Seguridad Vial, ha asegurado que "la Policía de Tráfico a partir de ahora puede pedir autorización judicial para acceder a los datos de la comunicación que se han realizado por el móvil".

No habrá excepción: WhatsApp, mensajes multimedia e incluso los correos que se hayan recibido momentos antes del impacto o durante el trayecto. Porque según datos de la DGT, su uso durante un minuto y medio reduce la percepción de hasta un 40% las señales de tráfico.

Las compañías telefónicas estarán obligadas a aportar estos datos al juzgado que investigue el siniestro, aunque estos registros solo se harán en aquellos casos donde la causa no esté clara. Serán los agentes quienes determinen si es necesario o no.

Desde RACE creen que no será tarea fácil demostrar qué ha provocado el accidente: "El teléfono móvil puede darse el caso de que lo busquemos y no lleguemos a dar con él, pero ya nos está distrayendo".

Además, ya se ha puesto en marcha una investigación para sancionar a los gestores y participantes de las aplicaciones chivatas de controles.