La fiscalía ha añadido al delito de asesinato que atribuye a Miguel López, sospechoso de matar a tiros a su suegra, María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la CAM Vicente Sala, el de tenencia ilícita de armas, según han confirmado fuentes judiciales.
La Policía no ha encontrado el arma utilizada para acabar con la vida de la víctima el pasado 9 de diciembre, aunque cree que se trata de una pistola muy antigua, fabricada en la primera mitad del siglo pasado. El informe de balística que obra en el sumario del caso expone que los cartuchos de las balas fueron recortados de forma artesanal para albergar menos pólvora y amortiguar así el ruido de los disparos, y no descarta que al arma se le incorporara un silenciador.
La Policía encontró en el registro de la vivienda de López, cuando lo detuvo el pasado día 8, varias armas cortas y largas, aunque todas ellas registradas legalmente y asociadas a las licencias de tiro olímpico y caza que tiene el encausado. En cambio, la pistola utilizada para cometer el crimen, que no ha aparecido, estaría fuera del circuito legal, y su tenencia podría constituir un delito.
El detenido, que se encuentra en prisión provisional desde el 10 de febrero, ha comparecido de nuevo esta mañana ante el titular del juzgado de Instrucción 7 de Alicante, José Luis de la Fuente. En esta cita se le ha comunicado que el procedimiento penal que se sigue contra él ha pasado a tramitarse por el sistema de jurado popular.
Además, la fiscalía ha mantenido los indicios que a su juicio existen contra el encausado para atribuirle un delito de asesinato con la agravante de parentesco y otro de tenencia ilícita de armas. Por su parte, la defensa ha solicitado que López quede en libertad -una petición que ha de formalizar en un recurso contra el auto de prisión- y que se archive el proceso para él, pues entiende que los indicios de criminalidad apuntados por la policía no tienen consistencia.
En la causa están personadas también dos acusaciones particulares: una que ejerce el único hijo varón de la fallecida y otra que representa a las otras tres hijas. Éstas han nombrado a un nuevo abogado para ejercer su acusación, según las fuentes consultadas, después de que el letrado que habían designado inicialmente haya asumido la defensa del sospechoso.
El juez instructor debe resolver con un auto las peticiones formuladas por las distintas partes y va interrogar en las próximas semanas a decenas de testigos que ya prestaron declaración en sede policial, según las fuentes citadas.
