Lo normal era encontrarla en aguas del Atlántico y decimos era porque la carabela portuguesa ha ampliado sus zonas de expansión y cada vez es más común encontrarla en nuestras costas. Este verano se han visto en País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia, pero también en zonas del mediterráneo.

Un ejemplar de carabela portuguesa ha aparecido este finde semana en una playa de Torrevieja. No es habitual que aparezcan en las playas del mediterráneo. Entonces, ¿Qué está pasando? Según los expertos, la subida de la temperatura del mar ha sido el principal motivo de la aparición de esta especie en zonas que jamás se habían avistado.

Pero ojo, no solo están en Valencia, también se las ha visto en otros puntos del mediterráneo, como en Tarragona, lo que pone en alerta a toda la costa mediterránea. No solo el aumento de la temperatura está detrás de su proliferación, también afectan otros factores.

"El viento es el motor que empuja a estos organismos desde las aguas abiertas del océano atlántico hasta el golfo de Vizcaya o la Costa Cantábrica", ha explicado Luis Ferrer experto en Oceanografía Operacional.

Un problema que durante los últimos años siempre ha estado localizado en el norte, ahora se desplaza por casi todo el litoral de nuestro país. Aunque esta falsa medusa sigue presente en aguas del cantábrico, este verano les ha tocado a las playas de Lugo y Gijón.

Aunque por su apariencia pueda parecer inofensiva, su picadura puede resultar hasta mortal. Su morado es un atractivo para muchos bañistas, pero sus tentáculos de hasta 30 metros son los que dan la voz de alarma. Este verano, ya saben, aunque cada vez sean más habituales, el baño siempre con precaución.