Asturias y Cantabria son las zonas más afectadas por losincendios forestales registrados en los últimos días en España en una inusualmente temprana ola de fuegos que azota el país. Pero no son las únicas: son muchos los focos que se han ido registrando a lo largo del último fin de semana, al tiempo que los equipos de extinción, emergencias, Bomberos, etc. han podido ir controlando, estabilizando y desactivando muchos de ellos.
El BOE contempla cuatro niveles de gravedad diferentes en incendios forestales que dependen de los daños ocurridos y los potenciales: las primeras tres situaciones de emergencia (0, 1 y 2) dependen de las comunidades autónomas, y van desde los fuegos que afectan únicamente a bienes de naturaleza forestal hasta aquellos que pueden llegar a afectar gravemente la población y también a bienes de naturaleza no forestal. El último nivel de emergencia, el 3, sólo puede declararlo el Ministerio del Interior, y en este caso podrían entrar en acción desde medios extraordinarios de las Fuerzas Armadas hasta algunos de carácter internacional.
→ Niveles de emergencia de incendios forestales en España
Si bien la información acerca de los fuegos se va actualizando recurrentemente, existe una herramienta europea para poder seguir en directo y en tiempo real los incendios registrados no sólo en España, sino en cualquier punto de Europa. Se trata del Visualizador de Situación en Tiempo Real del servicio de gestión de emergencias COPERNICUS, de la Comisión Europea, una de las herramientas del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS, por sus siglas en inglés). El EFFIS "apoya a los servicios encargados de la protección de los bosques contra incendios en la UE y países vecinos" y proporciona, tanto a la Comisión Europea como al Parlamento, "información actualizada y fiable" sobre los incendios forestales en Europa.
Puedes seguir en directo los incendios eneste servicio de la Comisión Europea. En el mapa puedes activar dos tipos de sensores de detección de incendios, el MODIS y el VIIRS. El primero identifica áreas en el suelo de mayor temperatura que su entorno, marcándolo como incendio activo, mientras que el segundo utiliza algoritmos similares a los del sensor de MODIS, pero con una resolución espacial mejorada, por lo que es capaz de detectar incendios activos de menor tamaño.