La disposición a anteponer el apellido materno ha sido creciente en los últimos siete años. Así, en 2010 fueron 1.546 los bebés inscritos con el apellido materno en primer lugar; en 2011, un total de 2.336; en 2012, 2.677; en 2013, 2.632; en 2014, 2.676; en 2015, 2.823; y en 2016, 2.953.
Desde el año 2000 se permite inscribir al niño con el apellido de la madre en primer lugar, si los padres envían una solicitud al Juez encargado del Registro Civil y una declaración de mutuo acuerdo. Si bien, hasta el pasado 30 de junio de 2017, en caso de no existir consenso, se daba preferencia por defecto al apellido paterno.
A partir de la entrada en vigor a finales del pasado mes de junio del artículo de la reforma del Registro Civil referido al orden de los apellidos, los progenitores deben ponerse de acuerdo en el plazo de tres días y en caso de desacuerdo, el encargado del Registro Civil deberá decidir el orden pero no poniendo el del padre en primer lugar por defecto sino teniendo en cuenta el interés superior del menor.
Si bien, los extranjeros residentes en España no se beneficiarán de esta modificación ya que solo pueden acogerse a la ley de su país de origen y, en el caso de que esta no contemple la posibilidad de decidir el orden de los apellidos, como ocurre desde el 30 de junio en España, no podrán acogerse a este derecho.
Esta cuestión no es nueva ni tiene relación con la entrada en vigor del artículo 49.2 de la Ley del Registro Civil. El artículo 219 del Reglamento del Registro Civil, en relación con el artículo 9 del Código Civil, establece que el nombre y apellidos de un extranjero se rigen por la ley de su país de origen. Dicha ley regirá la capacidad y el estado civil, los derechos y deberes de familia y la sucesión por causa de muerte.
Además, en España el nacimiento de un hijo de personas de origen extranjero no supone que ese descendiente tenga nacionalidad española ya que el país se rige por el criterio jurídico de 'ius sanguinis', es decir, que una persona adquiere la nacionalidad en función de la de sus padres y no por nacer en suelo español.