Ocurrido en 2014
La masacre del Tarajal cumple 11 años con secuelas, cicatrices y traumas sin cerrar tras la barbarie
El contexto Brice, superviviente del caso Tarajal, perdió un ojo en los ataques y presentará ante el el caso el Comité contra la Tortura de la ONU contra España.
Brice, un superviviente del caso Tarajal, ha presentado una nueva queja ante el Comité contra la Tortura de la ONU por la falta de investigación del uso de material antidisturbios durante la operación fronteriza del 6 de febrero de 2014 en la playa ceutí que le provocó la pérdida de visión de un ojo.
Él fue uno de los varios migrantes que intentaron, a nado, llegar desde Marruecos a Ceuta aquel día de febrero del 2014. En su caso, utilizó un neumático hinchado para llegar. Cuando ya se acercaba a la costa, escuchó disparos y empezó a ahogarse por el humo que le llegaba. Una pelota de goma impactó en su cara, dejándole sin visión en un ojo. En cambio, otros directamente no pudieron contarlo.
Al menos 14 personas perdieron la vida en esos disparos de bolas de goma contra ellos que, en apenas 21 minutos, ya que sufrieron al menos disparos de 145 balas de goma, 355 cartuchos de proyección y 5 botes fumígenos. "Como víctima de las balas de goma, encuentro increíblemente peligroso que se utilicen. Lo único que nos queda son las secuelas. Las cicatrices que llevamos por ello y los traumas", explica Brice.
Su caso va a presentarlo ante el Comité contra la Tortura de la ONU como ejemplo de la barbarie permitida por el gobierno español en 2014. "Tenemos que detener la barbarie y la violencia, detener la tortura de seres humanos y, en términos más generales, la explotación de vidas humanas que rige esa frontera que sigue siendo peligroso hoy en día", añade.
Lo que denuncia de la masacre del Tarajal es la falta de investigación del caso por parte de la justicia y autoridades españolas. De hecho, aseguran que no se tuvo en cuenta los testimonios de los 23 supervivientes de aquel día. "El Juzgado de Instrucción de Ceuta hubiera podido publicar una llamada a los supervivientes, que estaban en Marruecos, para que se pusieran en contacto con el juzgado", comenta Hanaa Hakki, directora de 'Border Justicie'.
"Estaban en un contexto de impunidad, que además tiene que ver que con que son personas migrantes, personas negras que no pueden acceder a la justicia", denuncia Maite Daniela Lo Coco, coordinadora de Migraciones del Centro Iridia.
11 años después, el caso del Tarajal está archivado por el Tribunal Supremo y recurrido en el Constitucional. Por ello, Brice ha llevado el caso ante la ONU para buscar justicia por lo ocurrido