Los accidentes con furgonetas no paran de crecer. En solo cinco años dejan un balance de casi 1.000 personas muertas y más de 4.000 lesionados, muchos de ellos en ciudad.
"La accidentalidad en cuanto a víctimas con furgonetas ha crecido en las ciudades un 94%. Esto lo atribuimos a la presión del comercio electrónico que está creciendo un 17% de media cada año", asegura Francisco Valencia, director de la Fundación Línea Directa.
La subida de las ventas ha hecho que aumente el número de envíos de productos en 24 o 48 horas. Aumentan las compras y con ello el estrés de los repartidores, muchos de ellos, conductores de furgonetas.
"En el e-commerce no todo vale. Estamos haciendo que el conductor de furgonetas tenga dos actividades al mismo tiempo: una la de la conducción y otra que es la actividad administrativa. Esto no ocurre en el transporte profesional de más de 3.500 kilos porque el conductor de camión o autobús se dedica solamente a conducir", destaca Ramón Ledesma, asesor de ‘PONS Seguridad Vial’
Según este estudio de la Fundación Línea Directa, se producen más accidentes con estos vehículos entre las 12:00 y 13:00 y especialmente los viernes. A los repartidores profesionales se suman muchos autónomos, que por ahorrar costes, hacen ellos mismos las entregas, aunque en muchas ocasiones, sin saber cómo colocar las cargas.
Además el sector denuncia una sobresaturación de furgonetas y de transportistas ilegales. "Para ser competitivo necesita hacer más de lo normal y eso supone trabajar con estrés, ir pendiente de albaranes, pendiente del teléfono, no puede entretenerse, no puede pararse y eso al final no es bueno para la seguridad", señala Antonio Villaverde, presidente de la Asociación de Transportistas Autónomos.
El compromiso de las empresas con la seguridad vial es fundamental, la prudencia de todos, también.