Madhu ha vivido la violencia contra la mujer en India desde el vientre de su madre. La joven se emociona al hablar con laSexta de su progenitora, esa mujer que con solo nueve años tuvo que casarse con un chico de 14. Con solo 15 años, su madre tuvo su primera hija, una niña, algo que las mujeres en India saben, no es buena noticia para la familia. Y con 17 años tuvo una segunda niña, Madhumita, quien es la protagonista de esta historia.

La joven cuenta que desde bien pequeña recuerda la violencia machista en su casa. "Mi madre nos cogió a mi hermana y a mí y nos llevó a la ciudad", recuerda, en referencia a la gran urbe de Calcuta, en la India oriental. Así, se convirtieron en fugitivas, e incluso tuvieron que subsistir en la calle.

"Mi padre fue a por ella (a Calcuta) para matarla, porque era una mujer que se había ido de casa y eso no estaba bien" relata Madhu. Entre amenazas y vejaciones llegaron a tener una tercera hija, otra niña, y el padre finalmente las abandonó.

Su madre arrastraba una salud delicada, y acabó postrada en una cama, tras lo que fue a parar a la organización de la Madre Teresa de Calcuta, donde mandaban a las personas sin hogar a morir. Por su parte, las tres hermanas quedaron divididas en diferentes familias. "Mi madre luchó contra la enfermedad porque no se quería ir hasta saber que yo estaba bien", cuenta emocionada.

Madhu califica su historia como un "milagro". Su primera salvadora fue una voluntaria argentina, quien viajó muchos kilómetros y pagó muchas rupias para poder reunirla con su madre.

Su vida dio un giro en el año 1998 cuando se encuentra con una mujer española que está de voluntaria en Calcuta. Ella es una niña y no sabe que se trata de una conocidísima actriz en España, Penélope Cruz, quien ha hablado de este viaje en varias entrevistas como una experiencia que cambió su vida.

En 2018, Cruz habló en un acto benéfico de una niña que le llamó la atención: "Conocí a una niña con alma de líder y una inteligencia bestial, pero al estar muy limitada en el orfanato, tenía más complicado demostrarlo".

La joven de origen español cuenta a laSexta que en uno de esos encuentros Penélope le preguntó qué quería ser de mayor, y ella contestó que quería ir a Londres a estudiar. Así, Cruz prometió que la ayudaría, y Madhu le hizo otra promesa: que aprovecharía esa ayuda para cambiar el mundo.

La llamada de Penélope Cruz que cambió la vida de Madhu

Diez años más tarde, llegó la llamada que cambió su vida: "Yo vi un número de Los Ángeles a las 00:00 horas y pensé que era un timo para sacarme el dinero" relata entre risas. "De pronto, hola ¿cómo estás? soy Penélope", Madhu recuerda que se quedó sin palabras.

En ese momento, la actriz le anunció algo importante: "¿Recuerdas la promesa que te hice? He visto tus buenas notas, felicidades, quiero ayudarte a estudiar en Europa". Y así fue como su vida cambió "en una noche", detalla con una sonrisa.

Madhu llegó a España en 2015, aunque no fue un camino fácil. Y es que a pesar de que Penélope la apadrinó, tuvo que hacer frente a una odisea burocrática que se complica aún más si no tienes los apellidos de un padre.La joven había pedido años antes a Penélope poder estudiar para ayudar después a niñas como ella. "Mi vida ha sido como olas, con momentos buenos y malos, pero me ha ayudado a ser una chica empoderada", añade.

Ahora, tras haberse graduado con buenas notas y haber conseguido trabajo, colabora sensibilizando sobre la situación de la mujer en India. Ella misma cuenta que cuando se nace mujer en India, se tiene la violencia tan naturalizada que ni siquiera a veces se puede procesar que se está sufriendo: "Estás en un autobús, te tocan, y te sale quedarte callada, no decir nada por miedo".

Los terribles datos de la violencia machista en India

Este año, las denuncias por crímenes contra la mujer han aumentado un 30% en India. Además, se han interpuesto más de 30.000 denuncias. Pero lo peor es que muchas mujeres ni siquiera denuncian por miedo o porque directamente no les van a creer: "Tú vas a una oficina de Policía a denunciar y lo que te van a preguntar es que qué ropa llevabas o qué hacías a esa hora en la calle", relata.

Las cifras son alarmantes y la pandemia ha agravado la situación de violencia contra la mujer. En 2020, el último año del que se tienen cifras oficiales, 371.503 mujeres fueron asesinadas en India, según los datos del Gobierno. La ONG de Calcuta 'Swayam' señala que cada día 77 mujeres son violadas y 19 mujeres son asesinadas o se suicidan por violencia machista.

Para sensibilizar sobre esta realidad, Madhu utiliza un lenguaje universal, el de la danza. Colabora en la organización de un festival de danza india en Madrid (Bollywood Summer), que destina dinero a causas sociales. La ONG 'Swayam' ayuda en Calcuta a mujeres como ella que tienen que hacer frente todos los días a discriminaciones múltiples y violencia por el hecho de haber nacido mujer: "Es una energía especial, con amor y color; el Bollywood es una buena herramienta para apoyar y dar visibilidad a causas que necesitan cambios", defiende.

Tras regalarnos una coreografía improvisada que acompaña de su sonrisa perenne, volvemos a mirar a su pasado y aclara emocionada que su madre murió en 2015 (meses antes de que viniera a España), y que nunca supo nada más de sus hermanas. También hablamos de futuro, y nos hace una última confesión: está esperando un o una bebé. "Me gustaría que crezca en un mundo que sea justo, independientemente del género, donde la justicia sea justicia, y una violación sea una violación".

En India no está permitido saber el sexo del bebé antes de que nazca para proteger a las niñas (ya que muchas, como le pasó a Madhu y a sus hermanas, no eran bien recibidas, y se pretende así evitar posibles abortos selectivos por razón de género). En su caso, no conoce todavía el sexo de su futuro hijo o hija, pero tampoco le importa, porque asegura que seguirá luchando porque forme parte de una sociedad igualitaria.