Las diez monjas de las comunidades de clarisas de Belorado (Burgos) y Orduña (Vitoria) han comunicado, mediante un burofax enviado al Arzobispado de Burgos, su "unánime e irreversible posición" de abandonar la Iglesia católica. En un comunicado fechado este viernes en Belorado y difundido a través de las redes sociales, las religiosas han insistido en que su decisión ha sido fruto de una "madura, meditada y consciente reflexión".

Las monjas han afirmado que cualquier pena o sanción canónica, incluida la excomunión, es considerada "nula" y una "farsa" por ellas. Las religiosas tenían hasta las 14:00 de este viernes para presentarse ante el Tribunal Eclesiástico por un delito de cisma, pero no se han presentado. Esto abre el camino para que el Arzobispado de Burgos, conforme al Derecho Canónico, declare su excomunión. Este decreto deberá ser firmado por el arzobispo Mario Iceta.

En su comunicado, las clarisas también han recordado que el Manifiesto Católico del 13 de mayo, firmado por la abadesa, fue refrendado por todas. Subrayan que su decisión de salir de la Iglesia es el resultado de un proceso de reflexión profunda y colectiva.