Los Mossos d’Esquadra investigan la muerte de un padre y sus dos hijos, de 7 y 10 años, en el interior de un piso del distrito barcelonés de Horta-Guinardó, intoxicados debido a una gran concentración de gas en el inmueble, en un posible caso de violencia vicaria -aquella que los hombres ejercen sobre las mujeres a través de sus hijos-, sin que se descarten otras hipótesis.
Según han informado a EFE fuentes cercanas al caso, la madre ha alertado de que el padre no le había devuelto a sus hijos tras las vacaciones navideñas -están separados-, ante lo que mossos y bomberos han acudido al domicilio, donde han encontrado los tres cadáveres en la vivienda, que desprendía un fuerte olor a gas.
Aunque la investigación se encuentra en su fase inicial y todas las hipótesis siguen abiertas, cobra fuerza la posibilidad de que se haya tratado de un caso de violencia vicaria, según las fuentes, aunque para ello los agentes tendrán que hallar indicios de que el padre ha matado a sus hijos intoxicándoles con gas para hacer daño a la madre.
Los Mossos han activado a cinco dotaciones, entre seguridad ciudadana, investigación y policía científica, para tratar de aclarar lo ocurrido. Mientras, el juzgado de instrucción 26 de Barcelona en funciones de juzgado de guardia de incidencias se ha hecho cargo de la investigación. Asimismo, ha informado de que no hay antecedentes de violencia entre él y la madre de los pequeños, según un comunicado del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC).