Tragedia en Gandía. Un bebé de nueve meses falleció tras haber inhalado los vapores tóxicos de un cubo que contenía agua con lejía cuando estaba gateando en una vivienda de la localidad valenciana.
Nada más percatarse de su estado, sus padres, de origen marroquí, lo llevaron al centro de salud de Corea, en Gandía, pero dado su estado el menor fue derivado de inmediato al Hospital de Gandía, donde finalmente falleció por una parada cardiorrespiratoria.
La autopsia determinará las causas exactas de la muerte del bebé, cuyo cuerpo no presentaba signos de violencia.
La Policía Nacional investiga lo ocurrido y si existe alguna responsabilidad en la muerte del bebé, que se encontraba con la madre en el momento de los hechos.