Un niña de cuatro años ha muerto, al parecer, al atragantarse con un fruto seco en su vivienda de Bilbao.
Según han confirmado fuentes del departamento de Seguridad, los hechos ocurrieron en una vivienda del barrio bilbaíno de Miribilla.
La niña sufrió un atragantamiento mientras comía frutos secos y empezó a quedarse sin aire.
Al lugar se trasladó personal sanitario, que trató de reanimar a la pequeña, aunque sus esfuerzos resultaron infructuosos.
Tal y como recoge este artículo de Guía Infantil, los frutos secos son muy peligrosos para los más pequeños.
Como las almendras, cacahuetes o aceitunas son uno de los aperitivos más demandados por los padres, los niños aprenden a comer lo mismo.
El problema está en que son peligrosos porque provocan atragantamientos. Es por esto que se recomienda que si los niños los van a comer sean triturados y molidos, nunca enteros.
Si después de comerlo el niño comienza a toser o respirar mal hay que llevarlo inmediatamente a urgencias.
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