Una mujer ha estampado su coche en el sur de Tenerife contra la fachada de un bar. Un accidente que podría haber acabado mucho peor, ya que el hombre del restaurante estaba sentado con el móvil cuando el coche le paso a escasos 30 centímetros.

Segundos antes, el propietario del local pudo alertar al cliente: "Le digo 'Portu, Portu, Portu' y justo se quitó, cayó el coche, fueron dos segundos"

El vehículo quedo encajado en el muro que separa la cafetería de la calle. Ni rastro de la mesa en la que estaba el cliente. Los daños son solo materiales. Su mujer había estado sentada en esta otra silla minutos antes del accidente.

El coche es automático. Todo apunta a una confusión al tratar de aparcar. La conductora, según el propietario del local, confesó no tener ni carnet ni seguro. Es la segunda vez que sucede algo así en este local del Sur de Tenerife.