La policía del franquismo tenía las órdenes claras con los gays, que eran uno de sus objetivos por la ley de "vagos y maleantes". Según esta ley, si eras "homosexual", podías acabar detenido.
Para las leyes de entonces, ser gay era lo mismo que ser un "proxeneta", un "mendigo profesional" o un "enfermo mental" porque todos ellos "ofendían la sana moral de nuestro país" y eran "sujetos caídos al más bajo nivel moral", es decir, "vagos y maleantes".
Hablamos con Elianne, que pasó cuatro veces por la cárcel, la primera de ellas a finales de la década de los 60. "Éramos los afeminados, los depravados y hasta los violadores de niños", nos cuenta.
La única respuesta que le daban cada vez que le enviaban a prisión era un golpe o un insulto. Cada vez que le detenían era enviado a la cárcel de Carabanchel, en Madrid, a una galería que los agentes llamaban 'el palomar'.
El miedo acompañaba a diario a Elianne y a miles de personas no heterosexuales. Muchos no salían de casa y otros esperaban a viajar fuera de España para liberarse.
Menores de entre 12 y 16 años
La Fiscalía pide 147 años de cárcel para el entrenador de fútbol acusado de agredir sexualmente a 21 menores en un equipo de Huelva
El contexto La acusación tuvo que presentar un escrito para que este entrenador no quedara en libertad. Esperan que antes de Semana Santa se celebre el juicio y acabe así esta pesadilla que comenzó en estos campos de juego.