Pocas horas después de que los casi 40.000 alumnos madrileños terminaran su selectividad este jueves, la polémica no se ha hecho esperar como en otras convocatorias anteriores. En esta ocasión, multitud de alumnos que se presentaban al examen de Matemáticas II, es decir, la correspondiente a los bachilleratos de Ciencias y Tecnología, han solicitado impugnar el examen ante la dificultad de la prueba "sin precedentes". Consideran que los contenidos no se corresponden con los aprendidos durante el curso, por lo que han abierto una recogida de firmas en la plataforma Change.org para lograrla.

A partir del lunes los alumnos de la Comunidad de Madrid, así como los de La Rioja, arrancaban una de las semanas más importantes en la vida académica de cualquiera, sin embargo, ha sido durante esta última jornada cuando la indignación entre los estudiantes se ha hecho más que palpable tras el examen de Matemáticas II.

Tal es la indignación que un estudiante afectado ha recogido en las últimas horas casi 13.500 firmas -13.495 a mitad de la tarde del jueves- para solicitar la impugnación del examen de Matemáticas II de la Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) de Madrid, debido al "giro drástico" en su estructura sin previo aviso.

La de Matemáticas II es una de las dos asignaturas obligatorias para quienes hayan cursado la modalidad de bachillerato de Ciencias y Tecnología. Cuestión que ha hecho que Juan López, explique en la página de firmas que su futuro y el de sus compañeros "depende de esto" tras "años de esfuerzo y sacrificio constante": "El examen de Matemáticas II de la EvAU en Madrid ha sido un examen sin precedentes, con un giro drástico que no se avisó en su respectiva reunión", explica el autor de la iniciativa.

Además, añade que "este cambio inesperado ha causado un gran descontento entre los alumnos, quienes se han visto gravemente perjudicados poniendo en riesgo la oportunidad de acceder a la carrera de sus sueños". "No podemos permitir que nos arrebaten nuestro futuro con la clara intención de bajar las notas de corte debido al cambio que se producirá el año que viene", ha continuado en su escrito el alumno.

López hace referencia a la modificación que se adoptará en la próxima convocatoria de este tipo de pruebas en el año 2025, en la que se contempla incluir ejercicios que obliguen al almuno a memorizar menos y a aplicar de forma más real los conocimientos aprendidos durante el curso. De hecho, tal y como recoge El País, el presidente de la Sociedad Madrileña de Profesores de Matemáticas, José Luis Muñoz, critica que las clases de esta asignatura sean "una recopilación de exámenes (...) anteriores".

Algo que a su vez explica puede llevar a que "cuando se plantean preguntas en las que hay que relacionar distintos conocimientos", como ha sucedido en este caso, "los estudiantes se sorprenden y se pueden bloquear". Prueba de ello es alguno de los comentarios que se encuentran en la plataforma de firmas en la que ha sido compartida la iniciativa.

Además de calificar la prueba de "catastrófica", otra estudiante asegura que durante la realización de la prueba "cada vez que levantaba la mirada veía a todos mis compañeros abatidos, con lágrimas en los ojos ya ni sabía que estaba haciendo, si un examen de matemáticas o firmando mi testamento". Por ello, los estudiantes consideran "fundamental impugnar este examen para asegurar una evaluación justa y equitativa para todos los estudiantes", escribe López en la plataforma.

Otra polémica en Madrid: el reto de los caballetes

Una de las novedades de este año han sido las doce nuevas materias de las que se han podido examinar los estudiantes, al haber cambiado el currículo del Bachillerato para adaptarlo a la ley Celaá (Lomloe). Muchas de ellas requieren de una preparación especial, por ejemplo las del Bachillerato de Artes, como dibujo artístico o las audiciones musicales.

La incorporación de esas nuevas materias ha planteado retos como conseguir 528 caballetes en la Complutense de Madrid para el alumnado de Artes. A lo largo de esta semana también se han sucedido las típicas anécdotas de olvidarse el DNI y tener que llamar al padre o a la madre para traerlo.

En otras ocasiones ha habido escenas curiosas como la de estudiantes acampados en el campus riojano que, con sus banderas y carteles propalestina, asistían en silencio a las declaraciones a la prensa de los responsables de la organización de la Evau. Buen susto se llevaron los estudiantes de un centro de la Comunidad Valenciana, porque el autobús que debía recogerles nunca llegó y tuvieron que acudir en coches particulares hasta su campus. Y, como todos los años, los exámenes comienzan temprano y eso ha obligado a madrugar para sortear la hora punta y sus sempiternos atascos, y aparcamientos abarrotados en los campus