Un vuelo Jet2 con destino a Madeira tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia después de que el comandante se desmayara. Un piloto fuera de servicio fue el encargado de hacer que el avión llegara a la pista del aeropuerto.

El avión, un Boeing 757, se dirigía desde Manchester a la isla portuguesa de Madeira cuando el comandante se empezó a encontrar indispuesto. Después de comprobar que no estaba en condiciones de seguir pilotando el avión, ya que se había desmayado, su compañero de a bordo, pidió ayuda por megafonía.

Fue entonces cuando un pasajero, trabajador de la propia compañía que se encontraba de vacaciones, "ofreció su ayuda a la tripulación, entró en cabina" y tomó los mandos para hacer el aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Oporto, Portugal, tal y como informa un testigo a MailOnline.

Al llegar a tierra, el comandante salió en silla de ruedas y con una máscara de oxígeno, para ser trasladado al hospital como "medida de precaución", según el diario.

La aerolínea ha explicado lo sucedido a través de las redes sociales y ha pedido perdón a los pasajeros: "El vuelo que conecta las ciudades de Manchester y Funchal se ha desviado a Oporto como medida de precaución debido a que uno de los pilotos se sintió indispuesto. Un avión en espera y una tripulación de reemplazo han sido trasladados a Oporto para que podamos llevar a los clientes a Funchal lo antes posible".

Imagen de archivo de agentes de la Ertzaintza

Uno de ellos en estado grave

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