Las Fallas, auténticas obras de arte efímero optan ahora a inmortalizarse. Su candidatura da el pistoletazo de salida para ser declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Se trata de dotarlas de protección para que no desaparezcan.

"Una fiesta que tiene muchísimos monumentos, algunos de ellos deben de ser protegidos, para que la fiesta no pierda su esencia y sea potenciada", declara Pere Fuset, concejal de Cultura Popular y Fiestas del Ayuntamiento de Valencia.

Además del monumento, se quiere proteger la música, la indumentaria tradicional y sobre todo, la pólvora. La pirotecnia ha estado muy presente, como también lo ha estado siempre el fuego en una fiesta con reminiscencias medievales.

España cuenta con una decena Patrimonios Inmateriales, entre los que está el flamenco, los castellers de Tarragona o el Misterio de Elche. Un nombramiento de este tipo asegura un impulso al turismo.

"Nos da un reconocimiento", señala Fernado García, presidente de la Junta Local del Misterio de Elche. Con una tradición de 200 años, su fiesta se ha ido transformando con el paso del tiempo, pero siempre ha mantenido su esencia. "Siempre se ha mantenido fiel a la sátira, la crítica y el buen humor", destaca García. Las fallas competirán con otras candidaturas, pero la suya es sin duda la más sonada.