El consumo de pan ha disminuido notablemente en pocas generaciones: mientras que si subimos dos escalones en el árbol genealógico encontrábamos familiares que consumían 134 kilos de pan al año, ahora cada habitante ronda los 31 kilos.
Pero, a pesar de la decaída del alimento, continúa siendo fundamental en la dieta mediterránea. Por ello, el próximo 1 de julio el pan dejará de ser el mismo: una nueva norma impulsada por la Unión Europea regulará su nomenclatura.
Para que pueda seguir llevando el apellido 'integral', el pan deberá tener harina de dicha variedad, trigo y cebada malteada. Además, encontraremos en él un cambio significativo: el precio. Pasará a la categoría de 'pan común' y con ello, a estar afectado por el 4% de IVA en lugar del 10%.
Con la entrada en vigor el próximo 1 de julio del Real Decreto 308/2019 sobre calidad para el pan se amplía la definición de pan común, lo que aplica el IVA reducido del 4% que ya tenía el pan normal a otros tipos de panes más beneficiosos para la salud, como los panes integrales, los de cereales distintos al trigo y los elaborados con salvado, que hasta ahora soportaban una tributación del 10%.
También se incorpora un límite máximo en el contenido de sal del 'pan común para fomentar una alimentación saludable y se ordena la elaboración artesana del pan, definiéndola como un proceso donde prima el factor humano sobre el mecánico y su producción no se realiza en grandes series.
Despido bajo investigación
¿A qué se enfrenta una empresa por no aplicar el protocolo de acoso sexual y despedir a la trabajadora que denunció una sumisión química?
Tecnocasa no solo no activó el protocolo cuando la víctima puso en conocimiento de su jefe la agresión, sino que la despidieron. La empresa podría enfrentarse a una elevada sanción, según señalan los expertos a laSexta.