El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Palencia ha ordenado prisión provisional, comunicada sin fianza para los dos jóvenes detenidos por la muerte de su hija recién nacida, cuyo cadáver fue hallado en el río Carrión.
Los dos jóvenes están siendo investigados por un delito de asesinatopor arrojar a su hija recién nacida al río Carriónen el término de Husillos (Palencia), según han informado este martes fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
Los dos han sido trasladados este martes en sendos coches policiales desde la Comisaria Provincial de Policía de Palencia, donde permanecían detenidos desde el lunes, tras haberse negado a declarar. También en su comparecencia ante el juez instructor durante esta mañana se han acogido a su derecho a no declarar.
Se trata de dos vecinos de la capital palentina, de los que no ha trascendido su identidad, y el informe forense ha desvelado que la niña nació viva y en perfecto estado, según han precisado fuentes policiales, que han detallado que la pareja tiró a la niña al río dentro de una bolsa de viaje.
Además este mediodía los vecinos de Husillos (Palencia) se han concentrado ante el Ayuntamiento de la localidad para rechazar este acto "deleznable", según ha indicado el alcalde, Juan Jesús Nevares, en declaraciones a los periodistas.
Precisamente el alcalde ha negado que los dos detenidos tengan vinculación con el municipio, pero algunos vecinos han confirmado que los padres del chico descienden de este pueblo, donde tienen una vivienda a la que acuden con frecuencia.
Fue el personal del centro de salud La Puebla, de la capital palentina, el que alertó de que estaban atendiendo a una joven que manifestaba que había dado a luz, aunque desconocía donde estaba el bebé. La Policía Nacional se desplazó al centro de salud y la mujer inicialmente declaró que había dado a luz la noche anterior y que había arrojado al niño a un contenedor del Polígono Industrial de Palencia, aunque la búsqueda durante más de dos horas en cuarenta contenedores no dio resultado alguno.
La joven fue dada de alta aunque los médicos advirtieron de que el parto se había producido días antes, por lo que tras ser interrogada por la Policía manifestó que junto a su pareja habían enterrado al bebé en un paraje cercano a la capital, aunque de nuevo la búsqueda fue infructuosa.
Tras ser nuevamente interrogada por la Policía, la pareja manifestó que el parto se produjo el pasado 28 de enero y que, tras el mismo, arrojaron al bebé al río Carrión, en un paraje cercano a Husillos, una localidad de unos 313 habitantes situada a unos 12 kilómetros de la capital palentina, donde fue encontrado.
