Cada vez que se denuncia un nuevo caso de violencia machista, se inicia un protocolo de seguridad para la víctima. Desde 2007, el Ministerio del Interior utiliza el 'Sistema Viogen', un cuestionario que se hace a la víctima para determinar el riesgo que corre. "Es información que maneja el sistema judicial para poder determinar las medidas y los niveles de protección policial", explica Marisa Soleto, directora de 'Fundación Mujeres'. El Viogen establece cinco niveles de riesgo, pero sus resultados no son vinculantes.
Este año, menos de un 1% de los casos se ha considerado como riesgo extremo, lo que recomendaría un acompañamiento constante. Casi la mitad se ha evaluado de riesgo medio-bajo. En ese nivel, la vigilancia a la víctima es periódica: desde una vez a la semana a una vez al mes. En el 50% de los casos, no se apreció riesgo ninguno, por lo que no se revisarán hasta que hay nuevos indicios. "La pregunta en este momento es cuántas mujeres están viviendo en una situación que a lo mejor necesita más protección", destaca Soleto.
Para garantizar las medidas correctas, los magistrados pueden solicitar adicionalmente un informe forense inmediato. "Evalúa tanto la situación de la mujer como del investigado. El protocolo son 72 horas máximo en el que se tiene que realizar la valoración, por tanto es fundamental. Así, antes de adoptar la orden, ya tengo esa medida" detalla Laura Esteve, magistrada con competencia en Violencia de Género. Sin embargo, la fiscalía critica que esta herramienta se utilizó en menos de un 1% de las solicitudes de protección en 2016.
Las víctimas pueden solicitar también asistencia letrada para saber cómo funcionará el procedimiento y las consecuencias de su denuncia. Y si por miedo no se atreven a acudir a la policía, bastaría con acudir al médico: "En los casos en los que hayan existido lesiones y la mujer acuda al médico, para nosotrosel parte médico tiene valor de denuncia", aclara Esteve. 48 mujeres y ocho menores han sido asesinados este 2017. Asociaciones feministas piden que se analice qué ha fallado en cada caso para que no se vuelvan a cometer los mismos errores.
Indignación en Valencia
El enfado de los vecinos de Massanassa tras el derrumbe del colegio: "¡Asesinos! ¡Venid a ayudar!"
Un grupo de vecinos se ha agolpado en el cordón policial que perimetraba la zona del derrumbe. Hasta allí se han trasladado las autoridades, que se han encontrado con el enfado e indignación de los vecinos de Massanassa.