Con la llegada de la Policía los dos jóvenes comienzan un 'sálvese quien pueda'. El chico huye despavorido al almacén buscando una salida, pero no la encuentra así que regresa para ver si consigue reducir al policía con el golpe imparable de una bolsa de chuches. Finalmente le llega algo de lucidez y se tira al suelo.
Su compañera, que tampoco atiende a razones parece que tiene suerte y se esconde. Mientras, en la tienda el joven ha cambiado de idea y no lo va a poner fácil y pone resistencia al policía.
La sorpresa final llega en forma de caída desde el techo de la tienda. Ha llegado la hora de asumir la derrota y han hecho falta una contusión craneal y hasta un refuerzo de seis policías para aceptarlo.