El temporal empieza a extenderse por el resto de España, y la borrasca ya es conocida entre los ciudadanos. En San Sebastián, la alerta naranja no parecía preocupar a todo el mundo pero ojo, porque las olas podrían llegar a los nueve metros de altura.

También están los que sí van bien preparados para soportar rachas de viento que llegan a los 110 con gorros, botas de lluvia, un buen abrigo y una bufanda.

Tres mujeres se protegen de la lluvia en el paseo marítimo de A Coruña

La borrasca Ana también ha llegado a la capital y a pocos kilómetros de Madrid, en Pozuelo de Alarcón, el viento ha tumbado este árbol. Ha caído encima de una furgoneta y los bomberos se han visto obligados a usar la motosierra para despejar la calle.

Peregrinos belgas a su llegada a Melide (A Coruña)

En Santander, los paraguas servían para cubrirse de la lluvia pero también para protegerse del viento que ha superado los 100 kilómetros por hora. Santander está en alerta roja y las vallas ya están preparadas por si hubiera que cortar la calle

Imagen del satélite Meteosat para la Agencia Estatal de Meteorología

Se espera que la peor borrasca de los últimos tres años roce la costa cantábrica en torno a las dos de la madrugada.