El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha registrado dos nuevos terremotos en 15 horas en el área metropolitana de Granada, el primero con epicentro en Santa Fe a las 17,08 horas de este sábado y el otro en Atarfe a las 7,50 este domingo, aunque en un principio este último también se ubicó en Santa Fe.
Según concreta el servicio Emergencias 112 en una nota de prensa, ha recibido varios avisos del último seísmo desde Atarfe, Granada capital, Las Gabias, Vegas del Genil y Maracena.
En uno de ellos, se alertaba de unos desprendimientos en una fachada de un edificio en la Carretera de la Sierra en la capital granadina, pendiente de confirmar si están motivados por el movimiento sísmico. No se han notificado daños personales por ahora. Del segundo ha atendido unas 35 llamadas.
Estos dos terremotos se producen después de que el sábado sobre las 12,15 horas el municipio sufriese uno de magnitud 4,4, el cual ha dejado más de 75 incidencias, un herido que ha sido evacuado al hospital tras caerle parte de la chimenea de su vivienda, grietas en viviendas y la caída del falso techo de un colegio.
De este seísmo se han registrado llamadas con avisos desde Granada capital, Churriana de la Vega, Albolote, Villanueva Mesía, Armilla, Atarfe, Vegas del Genil, Pinos Puente, la Zubia y Santa Fe.
Por otro lado, la Policía Local de Atarfe ha desalojado de forma preventiva varias viviendas ante posibles escapes de gas y aunque se ha comprobado y que no ha habido ningún escape, se van revisar todas las instalaciones de gas en Atarfe y Albolote.
39 terremotos desde el jueves
Desde el jueves de esta semana se han registrado en el área metropolitana de Granada 39 terremotos, 27 en Santa Fe y ocho en Atarfe, uno en Vegas del Genil, otro en Maracena, otro en Pinos Puente, otro en Chauchina, según concreta el IGN en su página web.
Tras un terremoto como el registrado en Santa Fe, Emergencias 112 recomienda mantener la calma y cortar cualquier situación de pánico, bulo, rumor o información exagerada.
Durante el seísmo, lo más adecuado es permanecer en el lugar donde uno se encuentra, tanto si se está dentro de un edificio o en la calle, ya que al entrar y salir de los edificios pueden ocurrir accidentes.
Dentro de un edificio es necesario buscar estructuras fuertes donde cobijarse, como por ejemplo una mesa o una cama, bajo el dintel de una puerta, junto a un pilar, una pared maestra o en un rincón. Tras la sacudida, se recomienda salir ordenada y paulatinamente de los edificios a través de las escaleras y, bajo ningún concepto, usar el ascensor para la evacuación.
En el caso de encontrarse en el exterior, se aconseja alejarse de cables eléctricos, cornisas, cristales y demás elementos que puedan sufrir roturas o desprendimientos a causa del movimiento.
Si el terremoto sorprenda a los ciudadanos en mitad de un viaje en el interior de un vehículo, es necesario pararlo de inmediato donde permita el tráfico y permanecer dentro del mismo hasta que finalice el temblor.
Se debe comprobar que no hay heridos, examinar a los que están alrededor y no olvidar que los heridos graves no deben moverse, a no ser que se tenga conocimiento de cómo hacerlo o en caso de empeoramiento grave o peligro inminente (fuegos, derrumbamientos, etcétera). Hay que comprobar el estado de las conducciones de gas, agua y electricidad, visualmente y por el olor, sin poner a funcionar nada.
Después de una sacudida violenta se debe salir ordenadamente y paulatinamente del edificio que se ocupe. No usar el teléfono a menos que sea para situaciones de urgencia, conectar la radio y seguir las indicaciones de las autoridades u organismos intervinientes.