Nueva norma, nuevas obligaciones
Táperes, planes de prevención o productos 'feos' en los supermercados: así es la nueva ley contra el desperdicio alimentario
¿Por qué es importante? Solo durante el año pasado en España se tiraron a la basura casi 1.200 millones de kilos de alimentos sin consumir.

Resumen IA supervisado
Cada vez es más habitual que los restaurantes ofrezcan a los clientes la opción de llevarse la comida que no consumen, en respuesta a una creciente concienciación sobre el desperdicio alimentario. En España, se desecharon casi 1.200 millones de kilos de alimentos el año pasado. Una nueva ley busca prevenir estas pérdidas en toda la cadena alimentaria, obligando a restaurantes a minimizar el desperdicio. Además, se promueve la venta de productos imperfectos para evitar el descarte por razones estéticas. Las empresas deben tener un plan de prevención, con sanciones de hasta 60.000 euros por incumplimiento, para evitar que millones de kilos de comida terminen en la basura.
* Resumen supervisado por periodistas.
Aunque en un principio daba un poco de reparo, lo cierto es que cada vez es más común que en los restaurantes pidamos para llevar aquello que nos sobra. Algo que se debe a que hay una mayor concienciación sobre el desperdicio alimentario. Eso sí, solo el año pasado en España, se tiraron a la basura casi 1.200 millones de kilos de alimentos sin consumir.
"Tenemos que hacer algo útil con ese excedente y es lo que intenta hacer la ley, lo primero, tener acuerdos con bancos de alimentos", explica una experta a laSexta. La nueva norma está enfocada a la prevención de las pérdidasa lo largo de toda la cadena alimentaria, obligando a restaurantes y comedores a minimizar su merma y dar la posibilidad al cliente de llevarse la comida que no consuman a casa.
En este punto, surge una pregunta. ¿Es responsable la cocina del restaurante de lo que ocurre con esa comida una vez sale del establecimiento? Al fin y al cabo, la gente tiene el sentido común de no llevarse un salmón diez días a su casa y luego comérselo, pero es necesario tener cuidado. Por eso, es necesario conservar adecuadamente esa comida y consumirla en el plazo más breve posible para evitar problemas.
Entre estas consecuencias negativas, está, por ejemplo, "la contaminación cruzada" mediante la que se puede introducir "patógenos que estaban alrededor", pero también "la proliferación de bacterias", explica Susan Judas, experta en medicina evolutiva, nutrición y microbiota. De esta manera, "cuando terminamos de comer" es esencial llevar esos alimentos "rápidamente, al frigorífico".
Esta ley también quiere fomentar las líneas de venta de productos imperfectos, o aquellos llamados 'feos' que nunca llegarán a un supermercado solo por su aspecto, al presentar rasguños, formas, tamaños o colores atípicos. Ahora, la obligación es de no descartar por cuestiones estéticas, así como que las empresas deben contar con un plan de prevención. Acciones que de incumplirlas pueden conllevar sanciones de hasta 60.000 euros en los casos graves. Todo para evitar que millones de kilos de comida acaben en la basura.