Este pasado sábado, Laura de 20 años y Marian de 49 fueron brutalmente asesinadas por el exnovio de la joven en Zafarraya, Granada. Eugenio, de 34 años, las disparó a sangre fría con una escopeta de caza.

Pasadas las 5 y media de la mañana, ambas llegaron a casa tras una noche de fiesta en otro pueblo. En ese momento, Laura iba hablando por teléfono con una amiga que escuchó todo. Cuando llegó a su habitación encontró los zapatos de Eugenio, al que le había dejado hacía unas semanas, y que estaba escondido en la planta de abajo. A pesar de dar la voz de alarma a su madre, no pudieron evitar el fatal desenlace.

Después de matarlas, el agresor se fue a su casa y se suicidó con el mismo arma. Fue el hijo menor de casi 18 años quien encontró los cuerpos de su hermana y su madre, y quien tuvo que ser trasladado al hospital por un ataque de ansiedad.

Los vecinos de Zafarraya (Granada) se han concentrado este sábado para condenar en silencio y con lágrimas el crimen machista de Laura y de su madre. Alrededor de medio millar de vecinos, muchos de ellos jóvenes, han condenado entre lágrimas y silencio el doble crimen que ha sucedido poco antes de las 6:00 horas de este sábado en Zafarraya, un municipio del Poniente de Granada de unos 2.000 habitantes.

La alcaldesa de Zafarraya (Granada), Rosana Molina, ha leído un manifiesto en el que ha descrito a las dos víctimas como mujeres "luchadoras e independientes", un texto de "repulsa, dolor y desconsuelo" por la pérdida de Marian, de 49 años y "amiga de la infancia", y de su hija Laura, de 20.