El epidemiólogo y pediatra Quique Bassat ha explicado en una entrevista en laSexta Noticias los tres argumentos principales que justifican la necesidad de vacunar a los más pequeños en cuanto estén disponibles los sueros.
"Hay tres grandes argumentos: evitar los efectos graves, infrecuentes pero que pueden ocurrir; evitar los aspectos persistentes de la enfermedad, el COVID persistente; y ayudar a reducir la transmisión de la enfermedad", ha apuntado el pediatra.
Cuestionado sobre si esta vacunación frenará la escalada de la incidencia, Bassat se ha mostrado optimista: "Esperamos que tenga un impacto muy positivo a la hora de reducir la incidencia", ha dicho.
Esto es porque son los niños los protagonistas de la nueva ola, como los adolescentes lo fueron en la quinta: la razón es que no están vacunados.
Además, Bassat ha recordado que la vacuna también ayuda a la hora de cortar la transmisión: "Un vacunado tiene tres veces menos riesgo de infectarse, pero no nos hace invulnerables".
Más Noticias
- Oposiciones al Cuerpo de Gestión Económico-Financiero de Castilla y León: requisitos, fechas y exámenes
- Campaña de una madre para respetar los aparcamientos para personas con discapacidad: "Ponte en su lugar, no en su sitio"
- Dudas y certezas del caso del menor electrocutado en Galapagar: ¿estaba solo o acompañado?
- Oposiciones para el Cuerpo Superior de Administración Económica-Financiera de Castilla y León: requisitos, fechas y exámenes
- Muere en el helicóptero de rescate del Ejército del Aire una mujer atacada por un tiburón a más 500 kilómetros de Canarias
En el caso de los niños, no afecta que sea una vacuna en una dosis menor que la que se aplica a los adultos: está razonado porque cuentan con un peso y un volumen menores, por lo que las dosis también han de ser menores.
Coloca pegatinas en los cristales
Campaña de una madre para respetar los aparcamientos para personas con discapacidad: "Ponte en su lugar, no en su sitio"
Marian señala a los conductores que no respetan estos aparcamientos con adhesivos, que coloca en los cristales de sus coches. Un movimiento que ya traspasa fronteras.