Quizás nunca vieron a las tropas de Star Wars invadiendo el centro de Málaga. Pero es el tercer año que la Fundación Andrés Olivares organiza este desfile.
El objetivo, tan especial y humano como los años anteriores: Concienciar de la importancia de la donación de médula ósea.
La donación económica que aporten los asistentes al desfile irá destinado a este objetivo. Gracias a esa sensibilización, Francisco Javier, a sus 27 años ha superado una leucemia: "Estoy vivo gracias a mi hermana. Por desgracia no tenía donante en el banco mundial de donación y bueno mi hermana era donante y compatible al 50%, se intentó y fue muy bien".
Pero recalca el desconocimiento que hay sobre la donación de médula: "La gente se cree que va a donar médula directamente y le van a operar y no, te sacan una muestra de sangre pequeña y entra en el banco mundial de donantes y si tienes suerte de que un año te llamen y seas compatible con una persona es un regalo".
No es el único. Hans, es otro asistente del desfile. Con 13 años, aún no ha vencido a su Darth Vader: "Todavía sigo yendo al hospital porque me tiene que revisar para ver si no recaigo".
Pero está seguro de que pronto lo logrará: "De momento estoy bien, no he recaído ni me han tenido que hacer otro trasplante".
Desde la Fundación Andrés Olivares, no cesarán en su empeño: "La Fundación nace por expreso deseo de mi hijo que con siete años tuvo leucemia y con nueve se marchó y me pidió que ayudará a niños enfermos como él , asegura el presidente de la Fundación".
Porque esto es cuestión de actitud y fuerza, y a ellos, la fuerza les acompaña siempre.