La ausencia de Carlos Mazón en la reunión de emergencia el día de la DANAcentra buena parte de las críticas hacia su negligente gestión de la catástrofe: no solo se presentó más de dos horas tarde en el CECOPI, sino que habría estado ilocalizablevarias horas. El president valenciano, sin embargo, sostiene que no estuvo "incomunicado en ningún momento" y se justifica utilizando una conversación que mantuvo esa tarde con el alcalde de Cullera, Jordi Mayor. El regidor, sin embargo, sostiene que Mazón no le realizó ninguna advertencia sobre la riada y que, de hecho, sigue sin entender muy bien cuál fue el objetivo de su llamada.

Una desconcertante conversación que el alcalde socialista relata en Al Rojo Vivo, donde sostiene que "no deja en buen lugar al president de la Generalitat que llames al alcalde del municipio que es el último al que se le puede salir su río, que es donde desemboca el Júcar". "No fue una llamada para advertirme de nada, fue una llamada muy coloquial", recalca.

"No me informó de nada, yo sí que le informé", insiste Mayor, que en ese momento pensó que Mazón le estaba llamando desde el CECOPI, aunque luego ha podido comprobar que no fue así. De hecho, reconoce que esa llamada del president de la Generalitat en ese momento le "tranquilizó". "Primero me asusté, pero como no me dijo nada y la cosa estaba bien...", recuerda el alcalde de Cullera, que en todo caso recalca que "en alerta roja uno no se puede ir a comer cinco horas a un restaurante". "Yo puedo explicar dónde estaba y qué hice, el problema es que él no lo puede explicar", reprocha Mayor, que insta a Mazón a que no le utilice "de coartada": "Su llamada no sirvió para nada y no determina en ningún caso nada de su actuación de ese día", asevera.

Según el relato de Mayor, el president, cuyo número no tenía guardado, le llamó por WhatsApp y le dijo: "Nada, es que estamos aquí y ha salido tu nombre digo 'pues voy a llamar a Jordi'". Acto seguido, le preguntó "cómo va la cosa" y él interpretó que se refería a la emergencia, lo cual en ese momento le pareció un buen gesto por parte del dirigente 'popular'. Sin embargo, agrega, "parece ser que no llamó a ningún otro alcalde". "Todavía no sé por qué me llamó a mí", admite.

El alcalde asegura que en ese momento pensó que estaban hablando de él porque Mazón se encontraba en el CECOPI y Cullera era un sitio clave para saber si el mar estaba tragando el caudal del río. "Si no fue en el CECOPI, es que no sé por qué estaba mi nombre encima de la mesa", reconoce Mayor, que apostilla que no conoce de nada a Maribel Vilaplana, la periodista con quien, según acabó admitiendo la Generalitat, Mazón estaba comiendo ese día.