El Ayuntamiento de Valencia ha permitido este viernes que los partidos de la oposición -PSOE y Compromís- desplegasen banderas LGTBIQ+ en sus bancadas correspondientes, a pesar de la oposición del grupo municipal Vox y en plena polémica por no colgar la insignia del balcón del Consistorio. Algo que llevó a la alcaldesa popular, María José Catalá a realizar unas declaraciones desafortunadas sobre la cuestión hace unos días.

El portavoz de Vox en el Ayuntamiento, Juanma Badenas, solicitaba al inicio de la mañana la retirada "de las banderas que no corresponden en este lugar" en referencia a las desplegadas en las bancadas de los socialistas y los ediles de Compromís. Ante ello, la alcaldesa ha asegurado haber hablado con el secretario, el cual le ha trasladado que "los que desde luego está prohibido es ponerlo en la parte de la barandilla y que, por tanto, no hay ninguna normativa aplicable a la parte del hemiciclo": "No habrá ninguna necesidad de retirar la bandera", ha concluido.

Sin embargo, Badenas ya desde su asiento ha insistido en que "la medida del Tribunal Constitucional habla de edificios públicos, no de fachadas", al tiempo que otro miembro de la cámara municipal ha matizado que la norma se da "cuando compite con banderas oficiales, si la hubiéramos cambiado por esa de allí sí, por esta no".

En ese momento, Catalá ha tenido que intervenir para aclarar que aquello "no era un debate", sino que "se ha tomado una decisión, así que vamos a comenzar", ha insistido a pesar de que Badenas continuaba con su argumento en un segundo plano.