El festival Sonorama Ribera se va a celebrar. Con múltiples medidas extraordinarias, según explica en Al Rojo Vivo su director, Javier Ajenjo, pero con la certeza de que los 5.000 asistentes que tienen su entrada podrán disfrutar de los conciertos.
En la otra cara de la moneda están los últimos datos resultantes de Cataluña: en los tres festivales que se celebraron en la región se contagiaron más de 2.200 asistentes. Sin embargo, Ajenjo insiste en la seguridad que se ha planteado de cara al evento, que tendrá lugar dentro de apenas una semana en Aranda del Duero.
"Hemos establecido unos protocolos que nada tienen que ver con un festival habitual. Hemos sectorizado en grupos de 1000 personas a los asistentes, hay accesos independientes, una zona para sentarse a ver las actuaciones y una zona de restauración separada", explica.
En este sentido, el director entiende que había que dar un paso más allá: a diferencia de otros años, el festival contará con 5.000 personas, a diferencia de los más de 30.000 que han registrado otros años. "No es que creamos que no se hayan hechos otros trabajos ingentes: se han realizado miles de conciertos seguros. La cultura debe seguir", ha subrayado Ajenjo, que incide en que la industria de la que forman parte tiene "un enorme valor que debe seguir adelante".
Así, el director ha pedido a los que tienen su entrada que confíen en que llevan "25 años demostrando que se pueden hacer las cosas bien", razón por la que insiste en que se cumplirán todas las medidas y protocolos. No obstante, también lanza: "Vamos a apelar a la responsabilidad individual. Ojalá pudiéramos asegurar que todo va a ir bien", concluye.
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