Los expertos llevan meses advirtiendo de la importancia de los llamados aerosoles en el contagio de coronavirus. Pequeñas partículas de saliva que quedan suspendidas en el aire y que pueden permanecer flotando durante horas en una estancia cerrada.
Estos aerosoles se han convertido en algo fundamental para que en los espacios cerrados se puedan producir contagios, aun cuando no haya gente presente. Como nos explica Mario Viciosa, periodista de 'Newtral.es', "es posible que una persona se contagie en un ascensor después de que otra persona haya estado en él sin utilizar mascarilla".
Los investigadores continúan trabajando en esta vía de transmisión. De hecho, ya se han dado casos similares en otros países. Según recoge 'Newtral.es', un brote de 70 contagiados en China tuvo origen en una mujer procedente de Estados Unidos que contagió a uno de sus vecinos tras usar el ascensor. En ningún momento coincidieron, pero este dio positivo tras usar el mismo ascensor que había utilizado la primera infectada.
Por ello, es importante la ventilación de los espacios cerrados en la medida de lo posible y el uso de mascarilla. Todavía no se ha dictaminado que esta sea una vía principal de contagio, aunque el debate está presente y los expertos recomiendan tomar todo tipo de precauciones en estos casos.
Pero esto no solo puede ocurrir en el ascensor de un portal de viviendas o de una empresa, sino también en todo tipo de espacios cerrados, como puede ser una sala de reuniones.