Vox continúa incendiando las calles y atacando a la prensa. El propio vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha participado en los últimos días en las protestas contra la sede del PSOE en Valladolid. Este jueves, tras la investidura de Sánchez, repetía su presencia llegando a sumarse a los gritos que coreaban los manifestantes.
Tras los cánticos contra PSOE y PP, tanto el vicepresidente de la Junta, como el consejero de Industria, Mariano Veganzones y el concejal de Comercio del Ayuntamiento de Valladolid, Víctor Martín, comenzaban a corear también consignas contra la prensa como el ya habitual "prensa española, manipuladora". Y lo hacía a medio metro de una una periodista de la cadena Ser que hacía su trabajo. Varios de ellos, además, sacaban sus móviles para grabar a la periodista que hacía su trabajo.
Uno de los manifestantes llegaba a gritar "vaya marcaje que está haciendo la periodista hoy" en un momento en el que la periodista trataba de obtener unas declaraciones de García-Gallardo.
Estas imágenes se suman a las de días anteriores en la que García-Gallardo, con gorra y megáfono en mano, dejánsose la garganta, clamaba contra la amnistía ante la sede del PSOE. El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, de Vox, ha estado en todas las protestas, profiriendo cánticos que, para la oposición, rompen la institucionalidad.
Un mes de noviembre en el que se le ha visto cumplir con sus obligaciones gubernamentales en contadas ocasiones: concretamente, hay que remitirse al pasado día 3 de noviembre para ver un acto en su agenda, el mismo día que empezaron las movilizaciones en la madrileña calle Ferraz.
Desde entonces, no ha faltado a ninguna: ha cancelado los actos de estos 11 días para tenerlos libres y corear lemas como "esas lecheras, a la frontera", "los periodistas blanquean los golpistas" o "noviembre nacional".
La semana pasada sí participó en el pleno de las Cortes de Castilla y León, donde precisamente hizo gala de a qué se estaba dedicando: "El domingo estuve en Burgos, ayer estuve en Tordesillas y esta tarde voy a estar frente a la sede del PSOE en Valladolid protestando", clamó.
Quien ocupara su cargo, Francisco Igea, le ha reprochado su actitud: "Un vicepresidente debe mostrar su fuerza en las instituciones, no convertirse en un hooligan. Vergüenza ajena", ha aseverado a través de sus redes sociales.