La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha negado el enfado en el seno del Gobierno con el anuncio a principios de semana del presidente valenciano Ximo Puig de rebajar el IRPF autonómico, en contra de la línea discursiva marcada por el Ejecutivo.
En una entrevista en Al Rojo Vivo, la responsable de Hacienda ha asegurado que las medidas de Puig se explican porque los líderes autonómicos "en este momento de dificultad económica de las familias siempre quieren proteger a los más vulnerables", pero ha explicado que no es el instrumento -la bajada del IRPF- adecuada. "El Gobierno de España puede hacer rebajas selectivas, el rendimiento neto del trabajo, y por tanto el instrumento de la deflactación puede dar lugar a equívoco", ha dicho.
"No se trata de enfadarnos unos con otros, se trata de practicar una política fiscal coherente y, sobre todo, de dar una imagen de país responsable", ha asegurado. "En Europa la sensación no puede ser de que pidamos 140.000 millones y mientras no ejercemos nuestras competencias fiscales", ha dicho.