La incertidumbre económica que ha dibujado el procés en los últimos años se refleja en la demanda de pisos en Cataluña. Muy especialmente en la capital, en Barcelona.
Nos vamos a fijar al detalle en los datos. Según un informe de Fotocasa, la ciudad condal acostumbraba a tener una tendencia al alza en cuanto a la demanda de vivienda. Con valores que llegaban a un crecimiento interanual del 21,1% en junio de 2017.
Esos datos comienzan a tambalearse con el referéndum del 1 de octubre de 2017: ya ese mismo mes nos encontramos con que esa variación interanual se sitúa en el 17%, pero a partir de ahí la tendencia cambia y ese crecimiento empieza a bajar notablemente.
Por ejemplo, y según observamos en los gráficos, un año después esa subida apenas representa el 2,7%.
Los meses posteriores sigue cayendo. Hasta encontrarnos con que este octubre de 2019, con datos que tienen en cuenta la sentencia del procés y los disturbios, la demanda de vivienda en Barcelona ya ni siquiera crece: baja algo más de un punto respecto al año anterior.
En términos generales, en estos dos años, desde octubre del 2017 (incluyendo el referéndum, DUI y la aplicación del 155) hasta octubre de este año se ha acumulado una caída de un 18,6% en la demanda de vivienda en Barcelona. En toda Cataluña, la caída acumulada sería del 12,2%.