El juez Juan Carlos Peinado citó el pasado martes a Begoña Gómez, mujer de Pedro Sánchez, como investigada por la presunta comisión de los delitos de corrupción en el sector privado y tráfico de influencias.

Está previsto que Gómez declare en calidad de investigada el viernes 5 de julio, a las 10 de la mañana.

"En la recta final de una campaña electoral, a nadie se le escapa, ni al juez Peinado ni a nadie, que una decisión como la que ha tomado iba a generar una bomba absoluta en términos políticos, como así ha sido", analiza Pablo Montesinos en Al Rojo Vivo.

"Queda por ver a quién va a beneficiar de forma definitiva porque fuentes de Moncloa dicen es que el voto progresista se está activando y que la operación contra Begoña Gómez y el entorno familiar de Pedro Sánchez está movilizando a los suyos. Lo que apunta el PP es que la presunta corrupción que afecta a Pedro Sánchez y a su alrededor, incluido lo particular, va a agrandar la diferencia entre las dos formaciones en las elecciones", añade el periodista.

Ante la respuesta del Ejecutivo, Pablo Montesinos se muestra muy crítico: "No nos podemos acostumbrar a que haya un ataque sistemático a las togas por parte del Gobierno de España, por parte de la Moncloa".

En este sentido, el periodista echa la vista atrás: "Se nos ha olvidado, pero antes la respuesta de cualquier miembro del Gobierno ante una decisión judicial era que respetaban las decisiones judiciales y no añadían nada más. Lo hacían los ministros del Gobierno del PP y del PSOE. Se entendía que el Gobierno de España tenía que fortalecer, reforzar con sus expresiones la separación de poderes y el respeto a los tribunales".

Acerca de la decisión del juez, Montesinos subraya que "el magistrado Peinado tiene todo el derecho a tomar las decisiones que considere cuando lo crea oportuno". No obstante, recuerda las palabras del magistrado González Vega en Al Rojo Vivo y destaca que "habría sido prudente que se hubiera esperado a la semana próxima".