La raza de Kamala Harris ha copado uno de los momentos más destacados del debate entre la candidata demócrata y Donald Trump. La polémica se remonta a finales de julio, cuando Trump mostraba sus dudas acerca de si Harris era "india o negra". "¿Es india o es negra? Ella era india y, de repente, hizo un cambio y se volvió una persona negra", se preguntaba.

En el debate, preguntado por los moderadores, Trump ha lamentado que se hiciese "un escándalo" de sus declaraciones. "No podría importarme menos lo que sea, no me importa en lo más mínimo. Lo que ella quiera ser, me parece bien", ha asegurado Trump.

Para Harris, las palabras de Trump sobre su raza suponen "una tragedia". "Sinceramente, creo que es una tragedia que tengamos a alguien que quiere ser presidente y que, a lo largo de su carrera, ha intentado sistemáticamente utilizar la raza para dividir al pueblo estadounidense", ha comentado.

Hace meses, la Casa Blanca vio los comentarios de Trump "repulsivos". "Nadie tiene derecho a decirle (a Harris) quién es ni cómo se identifica", afirmó la portavoz del Gobierno, Karine Jean-Pierre.