El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha exigido este jueves en Al Rojo Vivo que "el presidente del Parlamento de Baleares debería dimitir de forma inmediata" después de arrancar las fotografías de tres históricas represaliadas del franquismo que una diputada socialista miembro de la misma Mesa portaba en su ordenador durante el debate de la derogación de la ley de memoria democrática en la región que impulsaron PP y Vox.

Y es que a ojos de Urtasun, "humillar a las víctimas como hizo [Gabriel Le Senne] no puede tolerarse en democracia". Al mismo tiempo, aseguró que la causa de estos acontecimientos esta en que el "Partido Popular abre la puerta a la extrema derecha para que esté en las instituciones". Cuestión sobre la que destacó "no pasa en otros países de la Unión Europea" y ejemplificó con el caso francés, cuando su derecha tradicional propuso negociar con la ultraderecha.

Asimismo, puso de relieve que la posición del Gobierno de España es la de "la defensa de ley de memoria democrática, de los valores democráticos (...) y una "defensa muy férrea de las memoria de las víctimas". Estas declaraciones coinciden en la misma jornada con el primer paso dado desde la cartera que dirige para suspender la Fundación Francisco Franco.