La comunidad religiosa de Clarisas de Belorado en Burgos están acaparando todas las pantallas durante esta semana. La comunidad anunció que abandonaba la Iglesia Católica, pasando a manos de de Pablo de Rojas Sánchez-Franco, un obispo excomulgado. Símbolos franquistas, misas a la vieja ausanza y varios negocios como un criadero de perros, son las principales incógnitas que giran en torno a el porqué las clarisas han cortada relación y se dejan mover por una serie de individuos que, claramente, quieren sacar rédito de ellas.

El propio Wyoming, aprovechando la presentación de su nuevo libro, ha querido explicar su opinión sobre este caso: "Esto es como el humo que se ve a lo lejos, si empiezas a tirar del hilo. Hoy sale und ato revelador, la mayor concentración inmobiliaria con muchísima diferencia sobre otra, es la iglesia".

Además, ha expresado que las principales cábalas se dirigen a fondos buitres; sin embargo, Wyoming plantea que "estos tienen muchísimo más, es un problema de pasta".

"Han decidido que han visto una operación ahí y han dicho que si esta iglesia no mola, se va con otra", ha indicado. Una trama que, por el momento, no se ha cerrado y que sigue dando de que hablar, sobre todo por la cantidad de actores que son participes del caso de las monjas clarisas.