Un hombre, harto de ver cómo su amigo no le devuelve el dinero que le ha prestado, decide colocar un enorme cartel en una calle cercana donde sabe que pasará con el coche para ver si, de una vez por todas, le devuelve lo que es suyo. "Vividor sinvergüenza, primera advertencia", se puede leer en el cartel donde muestra, además, una foto de su amigo.

"Se ha gastado más en el cartel que en todo lo que le debía su amigo", explica Hans Arús que añade que el chico le debe "30 soles peruanos", que al cambio equivale a 7 euros, y el cartel "como mínimo ha costado más". Los colaboradores opinan que aún que sea "una miseria" lo que le debe, es mejor poner el cartel a "quedarse calladito y que tu amigo pase de ti".