En Tailandia, un hombre irrumpe en casa de su vecino a punta de pistola por un conflicto que mantenían por un límite de tierras. Cuando los perros de la víctima ven el arma, atacan sin pensarlo al asaltante, logrando así que su dueño se salve.
Carlos Quílez señala en Aruser@s que el arma era de fogueo y por ello la víctima salió ilesa. "Puede causarte lesiones pero no te mata", asegura antes de aplaudir la actuación de los animales que han mostrado la fidelidad a su dueño.